Juan Carlos cordero, viceministro de Patrimonio e Industrias Culturales y Creativas, dice que es la oportunidad de generar una gestión cultural “muy poderosa”.
A través de cooperativas, ferias y alianzas con guías turísticos, las mujeres de estas comunidades ancestrales han logrado transformar su trabajo artesanal en un motor de resistencia, visibilidad y supervivencia económica.