El hallazgo arqueológico, a raíz del incendio de 2019 en Notre Dame, reveló la identidad de un misterioso esqueleto, lo que resolvió uno de los enigmas históricos más intrigantes.
Es un género musical y una danza de parejas mixtas que data de fines del siglo XVIII, que se caracteriza porque los bailarines llevan un pañuelo en la mano derecha.