Más de 600.000 unidades de huevo fueron incautadas en el intento de ser vendidas en Perú y Chile. También se secuestró aceite, harina y azúcar.
Delegados de los privados de libertad de las cárceles de Palmasola en Santa Cruz y de Villa Busch en Pando, hicieron conocer la demanda de un trato judicial igual a los privados de libertad, como establece la Constitución Política del Estado.