La jefa departamental de Trabajo Beni informó que se trata de cuatro casos diferentes en los que la institución intervino.
Hace siete años que Esther y Jorge comenzaron a darle valor a lo que otros desechaban. Ellos, junto con sus hijos, transforman desde una cáscara de naranja en una joya, bicicletas en comedores, ropa en desuso y papel en macetas y otros objetos.